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El segundo relato que he escrito para el taller de escritura de lo biblioteca de Bigues i Riells me ha divertido muchísimo. Me reía escribiéndolo. La propuesta es la de escoger un personaje del que todo el mundo ha oído hablar pero del que nadie sabe nada en realidad. Darle un motivo, una vida, un por qué y como siempre dejar un final inesperado. La Gemma noS ha dejado el personaje: LA CHICA DE LA CURVA. Sin duda un reto de escritura para pasárselo muy bien.
LA CHICA DE LA CURVA
Esto no tiene ni puñetera gracia. Cuando me
encuentre con Loli y con Toñi se van a enterar de lo que es bueno. ¡Qué mañana
me CASO!!!!! Nunca debí confiarles la preparación de mi despedida de soltera. Se
han vuelto locas del todo ¿A quién se le ocurre montarme esta película de
miedo?
Cuando ha llegado a casa el
coche de alquiler pensaba que iría al mejor restaurante de la ciudad y deseaba
que me pusieran ese horroroso pene de plástico en la cabeza como diadema. Y que
me vistieran de Blancanieves o de Betty Boop y ese señor con cara de palo,
bigote y vestido de ascensorista me ha entregado un gran paquete rojo a topos
envuelto en un lazo de seda. La nota: Condición
indispensable, ponerse lo que hay dentro de la caja.
UN CAMISÓN!!! Por Dios!,
¿Dónde queda mi glamour de señorita de negocios de tacón de aguja y traje súper
ceñido, si hasta he ido a la peluquería y me han puesto la mar de mona con un
recogido ejecutiva. Si Jose me viera con esta facha se pensaría dos veces lo de
casarse. A la mierda el moño, a la mierda los zapatos de tacón negros. Espero
que por lo menos me traigan algún macizorro para hacer un estriptis. Como
alguna traiga esta noche una cámara de fotos me la como con patatas.
Joder, que el tipo este no
sabe conducir ni tampoco adonde me lleva. El GiPieSe se le ha vuelto loco al
dejar el desvío de la carretera y entrar en una curva hacia el bosque. Está
sudando la gota gorda y mira el espejito retrovisor a cada momento para ver cómo
estoy yo. Le devuelvo una sonrisa boba sin saber qué hacer. Definitivamente se
ha perdido, nos hemos perdido, mejor dicho. Loli y Toñi os voy a matar y a
esparcir vuestros intestinos en helicóptero.
Joder, joder, que cada vez
está más oscuro, este señor está más perdido y el GiPieSe nos envía a través de
la nada. Tengo que hacer algo, busco nerviosa el móvil en la bolsa de Alcampo
que venía como complemento del camisón y cada vez tengo más ganas de cometer un
triple asesinato.
Llamando a Loli. Tu,tu,tu,tu…
Comunica
Llamando a Toñi. Tu,tu,tu,tu….
También comunica.
¿Qué hago?, pienso mientras se
me dibuja una cara de idiota de remate que sabe que le quedan menos de doce
horas para celebrar un banquete con seiscientas personas en el hotel más lujoso
y se está paseando en camisón por una carretera de curvas con un majara que
debe de cobrar a seis euros la hora. ¡Por favor!
— ¡Ah!!! ¡Que nos matamos,
frenaaa!- le grito mientras voltea una curva de 180 grados sin pisar el pedal
del freno y casi nos metemos en el bosque en contra dirección.
— ¿Está bien, señorita? - me pregunta girándose hacia atrás sin saber
dónde meterse. Casi se le saltan las lágrimas del susto. Está muy nervioso. Es
un novato, sin duda. Como yo.
— Pero, ¿cómo quiere que esté
bien? Míreme, llevo el camisón de mi bisabuela y no sé adónde voy. Pare, por
favor, voy a buscar cobertura.
Salgo del coche con mi bolsa
de Alcampo en el brazo, despeinada como una loca y moviendo el móvil hacia
todos lados en busca de la puñetera cobertura. Dos rayitas… tres… aquí, aquí me
paro y voy a llamar a Jose. Nunca más voy a confiar a nadie una fiesta
sorpresa. Las mejores son las que se prepara una misma.
Llamando a Jose,
tuuuuuuuuuuuuuuuuuuu…
— ¿Hola?, ¿Tere?
—Sí
Jose, sí soy yo.
— Te
oigo muy mal
— Es
que tengo mala cobertura, espera que me muevo un poquito
— Tere, he…bu…sol..de…
El móvil
al que llama está apagado o fuera de cobertura. ¡Me
cago en too lo que se menea! Tengo que volver al coche a ver si ese loco puede
moverse más arriba y puedo llamar. Pero… ¿Adónde vas? El tío acaba de arrancar
el coche y sale pitando como un bestia. Será cab… Pero ¡no me dejes aquí sola!
Madre mía, ahora empiezo a
tener miedo de verdad. Todo está muy oscuro y los árboles parecen estar vivos.
Vamos a ver, tranquilízate, Tere, tú puedes con esto. A ver, con la linterna
del móvil veo que hay rayas blancas pintadas en la carretera, así que este
lugar no está perdido de la mano de dios. No te desesperes, algún coche tiene
que pasar tarde o temprano. Llamo de nuevo a Jose, a Toñi, a Loli hasta que
casi no tengo batería. ¡Todo el mundo se está confabulando contra mí!
¡Eh!!! Se acercan unas luces
tras la curva, un coche por fin. ¡Eh!!!, me ha visto, me ha visto. ¡Bien! Es un
seat blanco que se detiene a pocos metros. Tere, tranquila, no corras que se va
a pensar que lo vas a atracar. Relájate, lo único que quieres es que te lleve a
casa, ¿verdad? Pues, mucha tranquilidad y al ataque.
— ¿Te llevamos a algún lado? — me pregunta el joven que acaba de
bajar la ventanilla. A su lado, hay una chica muy sonriente.
—Si, por favor—les contesto sin mostrar nerviosismo. Cuando
quiero soy muy seria y formal.
Entro en el coche, al menos
son una pareja y no me va a pasar nada malo. Pero ¿qué es ese olor? Buf, están
fumando marihuana. Es insoportable.
— ¿De
dónde vienes? — me pregunta el chico con esa sonrisa de bobo.
Joder, voy a tener que
inventarme una historia increíble para que me crean y no salir mañana en todos
los periódicos del país.